Mientras en tiempo real corremos hacia el sur, rumbo Creta, para buscar un verano cálido... nuestras crónicas llegan a Andros que para nosotros marcó el final de la primavera. Con Evia y las Espóradas llegaba el verano, y Andros fue un buen punto en el que reponer fuerzas!
Llegamos a Andros buscando un buen puerto en el que pudiera quedarme sola unos días.
La isla tiene dos puertos, Gavrio y Batsi. A priori el primero estaba mejor por lo que nos dirigimos a él aunque después pudimos comprobar que Batsi había hecho obras de mejora y un nuevo espigón había solucionado los problemas que creaba el viento del sur
Es un puerto bastante cómodo en una isla que no es especialmente popular en las rutas de los que alquilan velero para disfrutar de una semanita de mar; estos acostumbran a poner la proa hacia Mykonos y disfrutar de las islas más conocidas. Así que nos encontramos varios barcos de propietario y optamos por abarloar al muelle (aunque así caben menos veleros, no parecía ser todavía temporada alta).
El pueblo del pueblo son apenas dos calles más que la fachada al mar pero el ambiente era muy agradable: un par de buenos supermercados, bares con jóvenes jugando a cartas o al backgamon, tabernas pequeñitas... una playa al fondo.
En el muelle agua sin restricciones y posibilidad de conectarse a la elecricitad.
NOS QUEDAMOS!!!!
Antes de que Johan se fuera decidimos alquilar un coche y pasear un día para conocer la isla de la que habíamos leído que era verde (tanto tiempo de secano en las Cicladas nos pedía ya un poco de clorofila) y que ofrecía agradables paseos.
Empezamos por ir a visitar Batsi por si la cosa pintaba mejor y aun podíamos cambiar al Alea de lugar. El pueblecito es más grande y animado que Gavrio (más ruido nocturno... peor sueño) y el puerto estaba mejorado y con algún velero. Sin embargo la única toma de agua estaba lejos, el ferry salía del otro puerto. A pesar de que nos pareció un buen sitio en el que recalar, dejamos las cosas como estaban
Nos hizo mucha gracia el faro que indica la entrada del puerto. Para los que nos pedís que hagamos fotos de faros, ahí va una chistosa. Actualmente los faros ya han perdido el romanticismo del farero que abnegado mantenía la llama encendida para avisar al navegante del peligro de las rocas; placas solares y luces de leds, mantenimiento a través de control informático y poco más... pero... aquí algún problema tuvieron con la placa o la bombilla y poco se esforzaron en darle una solución estética: Ahora la luz de entrada funciona y está, pero está a ras de suelo!
Desde Batsi pusimos rumbo a la capital, o sea, a la Chora -que esta vez distaba mucho más de 5 km del puerto principal- pero por el camino tuvimos la oportunidad de pararnos en un montón de rincones que ofrecían sombra y agua... sonidos que ya teníamos tan olvidados.
Dibujado en la montaña,m colgado entre el verde de los árboles y mirando al mar encontramos a Steniés, un buen lugar donde perderse unos días y olvidarse de que el mundo sigue girando ahí afuera
Y a los pies del pueblo una playa de arena que apenas si tenía unos cuantos bañistas
solo de pensar en un día de verano en Benidorm -pongamos por caso- y compararlo con esto y se nos ponían los pelos de punta
Un lujo poder disfrutar en una terracita con una cerveza bien fría del color del mar
Nos comimos nuestro picnic disfrutando de las vistas y pusimos rumbo a Hora. A pesar de la bonita ensenada no es un puerto que las guías recomienden para los veleros y ciertamente no vimos a ninguno fondeado ni amarrado allí.
La ciudad, que a lo lejos prometía, nos decepcinó un poquito porque estaba "en restauración": muchas casas a medio arreglar (o medio caídas), mucho comercio cerrado -esperando tal vez la llegada del verano- y poco más que reseñar
Salvo un precioso faro que señala un peñón en mitad de la bahía
Como un pequeño regalo para alegrar la vista!
Mi estancia en Gavrio fue tranquila. Ahí compartí ratos con otros navegantes que como nosotros habían elegido las Espóradas para pasar el verano. Nosotros optamos por llegar a ellas subiendo por el canal que se forma entre el continente y la isla de Evia, pero muchos optaban por subir hasta Skiros por la cara este de Evia y para ello necesitaban aprovechar los últimos coletazos del viento del sur. Todos corrían hacia arriba huyendo del Meltemi... nosotros -para variar- subiríamos lentos y felices por el camino más largo y por lo tanto con más historias que vivir!!
La isla tiene dos puertos, Gavrio y Batsi. A priori el primero estaba mejor por lo que nos dirigimos a él aunque después pudimos comprobar que Batsi había hecho obras de mejora y un nuevo espigón había solucionado los problemas que creaba el viento del sur
Es un puerto bastante cómodo en una isla que no es especialmente popular en las rutas de los que alquilan velero para disfrutar de una semanita de mar; estos acostumbran a poner la proa hacia Mykonos y disfrutar de las islas más conocidas. Así que nos encontramos varios barcos de propietario y optamos por abarloar al muelle (aunque así caben menos veleros, no parecía ser todavía temporada alta).
El pueblo del pueblo son apenas dos calles más que la fachada al mar pero el ambiente era muy agradable: un par de buenos supermercados, bares con jóvenes jugando a cartas o al backgamon, tabernas pequeñitas... una playa al fondo.
En el muelle agua sin restricciones y posibilidad de conectarse a la elecricitad.
NOS QUEDAMOS!!!!
Antes de que Johan se fuera decidimos alquilar un coche y pasear un día para conocer la isla de la que habíamos leído que era verde (tanto tiempo de secano en las Cicladas nos pedía ya un poco de clorofila) y que ofrecía agradables paseos.
Empezamos por ir a visitar Batsi por si la cosa pintaba mejor y aun podíamos cambiar al Alea de lugar. El pueblecito es más grande y animado que Gavrio (más ruido nocturno... peor sueño) y el puerto estaba mejorado y con algún velero. Sin embargo la única toma de agua estaba lejos, el ferry salía del otro puerto. A pesar de que nos pareció un buen sitio en el que recalar, dejamos las cosas como estaban
Nos hizo mucha gracia el faro que indica la entrada del puerto. Para los que nos pedís que hagamos fotos de faros, ahí va una chistosa. Actualmente los faros ya han perdido el romanticismo del farero que abnegado mantenía la llama encendida para avisar al navegante del peligro de las rocas; placas solares y luces de leds, mantenimiento a través de control informático y poco más... pero... aquí algún problema tuvieron con la placa o la bombilla y poco se esforzaron en darle una solución estética: Ahora la luz de entrada funciona y está, pero está a ras de suelo!
Desde Batsi pusimos rumbo a la capital, o sea, a la Chora -que esta vez distaba mucho más de 5 km del puerto principal- pero por el camino tuvimos la oportunidad de pararnos en un montón de rincones que ofrecían sombra y agua... sonidos que ya teníamos tan olvidados.
Dibujado en la montaña,m colgado entre el verde de los árboles y mirando al mar encontramos a Steniés, un buen lugar donde perderse unos días y olvidarse de que el mundo sigue girando ahí afuera
Y a los pies del pueblo una playa de arena que apenas si tenía unos cuantos bañistas
solo de pensar en un día de verano en Benidorm -pongamos por caso- y compararlo con esto y se nos ponían los pelos de punta
Un lujo poder disfrutar en una terracita con una cerveza bien fría del color del mar
Nos comimos nuestro picnic disfrutando de las vistas y pusimos rumbo a Hora. A pesar de la bonita ensenada no es un puerto que las guías recomienden para los veleros y ciertamente no vimos a ninguno fondeado ni amarrado allí.
La ciudad, que a lo lejos prometía, nos decepcinó un poquito porque estaba "en restauración": muchas casas a medio arreglar (o medio caídas), mucho comercio cerrado -esperando tal vez la llegada del verano- y poco más que reseñar
Salvo un precioso faro que señala un peñón en mitad de la bahía
Como un pequeño regalo para alegrar la vista!
Mi estancia en Gavrio fue tranquila. Ahí compartí ratos con otros navegantes que como nosotros habían elegido las Espóradas para pasar el verano. Nosotros optamos por llegar a ellas subiendo por el canal que se forma entre el continente y la isla de Evia, pero muchos optaban por subir hasta Skiros por la cara este de Evia y para ello necesitaban aprovechar los últimos coletazos del viento del sur. Todos corrían hacia arriba huyendo del Meltemi... nosotros -para variar- subiríamos lentos y felices por el camino más largo y por lo tanto con más historias que vivir!!
La página web del Alea está en fase de reconstrucción. Pero como más de una persona nos ha escrito pidiendo si podíamos adelantar nuestro itinerario de los próximos meses, aquí os dejamos como adelanto un mapa que dibuja nuestros planes hasta agosto 2011 (si pincháis sobre el mapa la imagen se hace más grande)
Para más información podéis escribirnos a
sailingalea@yahoo.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario